Mercedes es mi madre. Y gracias a ella, no solamente estoy aquí ahora mismo, sino que disfruto de dos de las grandes pasiones que se pueden tener. A saber: cocinar y leer.
Desde pequeña la vi leer y disfrutar de la pintura, de los libros y de los libros de pintura. Crecí leyendo la vida de pintores que en aquel momento no tenía ni idea de quien eran, pero recuerdo caballos azules que se salían del lienzo y llenaban la habitación de colores. Me di cuenta de que el mejor amigo del hombre es un libro (y conste que adoro a los perros).
Y desde pequeña también iba como alma en pena detrás de ella rogándola que hiciéramos rosquillas (santa paciencia). No sé de donde la sacaría (la paciencia tampoco), pero tenía escrito en un papel cuadriculado una receta de rosquillas que ahora enmarcada está colgada en una de las paredes de mi cocina. No es que a ella le gustase mucho cocinar, pero si no hubiese sido por aquellas rosquillas que hacía con mi madre, posiblemente este blog estaría dedicado al encaje de bolillos o sabe Dios a qué.
Ayer fue el día de la madre, ¡Felicidades mama! y felicidades también a todas las madres, y a los y las que no lo sean, seguro que madre sí tienen. Se me ha ocurrido dedicarle esta entrada, por todo lo que siempre me ha dado, no solo por los libros y las rosquillas.
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ROSQUILLAS DE MERCEDES
Ingredientes:
2 huevos
1/2 taza de azúcar
1/2 taza de aceite de oliva virgen extra
1/2 taza de agua
ralladura de la piel de dos limones si son pequeños o de uno grande
500 gr. de harina
1 sobre de levadura
1.- Se baten los huevos con el azúcar y la ralladura de limón hasta que estén espumosos.
2.- Se añade el aceite y el agua y se sigue batiendo.
3.- Mezclamos la harina con la levadura y tamizándola la echamos sobre la mezcla anterior.
4.- Trabajamos la masa con las manos hasta que quede suave y lisa.
5- Vamos tomando bolitas de masa y sobre la mesa les vamos dando forma de churro cuyos extremos uniremos para formar la rosquilla. Con un cuchillo damos un par de cortes en cada rosquilla para que se frían bien.
6- En una sartén grande calentamos aceite de oliva y una vez caliente vamos friendo las rosquillas. Las sacamos y las dejamos escurrir sobre papel absorbente.
7.- Una vez frías espolvoreamos con azúcar glas.
A veces preparo un almíbar con agua de azahar y miel y baño las rosquillas en él. Están deliciosas también. Como siempre, se admiten toda serie de mejoras y variantes.
Le he prometido a Guillermo que iba a sacar en el blog el regalo que él me ha hecho.
En realidad he tenido dos. Uno de ellos un MacBook que va como un rayo, pero no es nada al lado de este preciosisisisisisimo jarrón con flores de mi Guillermete. Es alegre y lleno de color, como él.
¡Hasta pronto y por favor, no dejéis de cocinar!
P.D. Gracias, muchísimas gracias a toda la comunidad maquera por venir a visitarme. Dentro de poco le veo a phroc con un tatuaje en el brazo en el que en vez de mi nombre ponga PuroMac.
Imprimir la receta
Que regalo más bonito que te ha hecho tu hijo. Yo estoy deseando que venga mi hija de la escuela con cositas para mi… Enternecedor… Y estas rosquillas buenísimas. Ahí si no fuera por nuestras madres. Yo también guardo la de los pestiños de mi madre como oro en paño, la de su puño y letra… Un beso guapa y hasta pronto. Ah!, te tengo una sorpresa en mi blog, ya sabes, un premio, jejejeje… Chao!
Que sería de nosotras sin las recetas de nuestras mamis. Estupenda receta, se ven deliciosas.
Besos
Madre mia …como me ha gustado…Enhorabuena
pero que rosquillas…
lo mejor de todo la dedicatoria a tu madre y como no el regalo de tu peque.
Nos ha gustado mucho tu homenaje a tu madre, y a todas las madres, por lo que te damos las gracias.
También, nos ha gustado mucho el detalle de publicar el regalo de tu hijo, que como todos los regalos realizados con las manos, y con amor, son preciosos.
Y por supuesto nos ha gustado la receta, de esas rosquillas que también nuestras madres preparaban, ya que no sabían nada de la celiaquía.
Muchas gracias por tus comentarios en nuestro blog, ya que nosotros también te apreciamos y a traves de tus palabras, de tu amor por los libros, y por la pintura (algo que también se realiza en esta familia) nos vamos conociendo más y más.
Besotes,
Ana y Víctor.
María José: Como siempre mil gracias por estar ahí, justo donde estás apoyándome y dándome tu cariño. Un beso.
Rosa, me voy a tu blog que creo que tienes una receta que te voy a copiar. Hasta ahora mismo.
Su, me alegro que te haya gustado, pero yo sigo todavía alucinando con tu pizza.
Gina, una madre es una madre siempre. Y los dulces de las madres siempre serán los mejores del mundo. Un beso.
Ana y Victor, sois estupendos, de verdad. Muchas gracias por todo. Dentro de poco estoy en vuestro blog para copiar la tarta maravillosa que teneis ahí esperando. Un beso.
Qué bueno Sonia, que ya somos más y nos podemos ayudar en esta carrera de los Mac. Fantástica tu historia de las rosquillas, a ésto nosotros lo llamamos rollitos, y lo que me encantaría ver es ese cuadro con la receta de tu madre enmarcada, anda sácalo que merece un post!!!!.
A Guillermo un fuerte apretón porque está hecho un artista, habrá salido a tu madre.
Ya me dirás cómo haces para poner el cuadrito de imprimir receta abajo del post, qué suerte tienes de tener un marido informático, aquí somos todos nulos.
Un abrazo a todos.
Ana
Hola Sonia!!! Muchas gracias por tu visita!!!!! te deseo mucha suerte…. y decirte que me gustado mucho tu blog y la dedicatoria a tu madre……y el cuadro, es seguramente, el mejor libro de cocina!!! Un beso muy fuerte para cuando bajes de las nubes. Bea
Ana,
Intentaré hacerte llegar la solución de lo de imprimir la receta. Es algo que quería hacer desde el principio y no sabía cómo. Un abrazo.
Bea,
Me alegro de verte por aquí. Espero que sigamos viéndonos ciberneticamente. Gracias por venir. Un abrazo.
Las nubes no se a que saben pero esas rosquillas seguro que a gloria bendita
Hola Sonia:
Gracias por haber venido a mi blog, ya veo que te ha gustado. Yo sí conocía el tuyo y me gusta mucho. Estas rosquillas están deliciosas y veo que viajas mucho, por lo que estas delicias caseras te sabrán a gloria. Bueno como las nubes saben tan bien, voy a enlazarlas a mi blog. Si tienes algún inconveniente me lo dices y retiro el enlace. Besos y gracias
que ricas rosquillas.
Que tengas un excelente fin de semana y que hermoso regalo.
Saludos
olguis.
Hola Sonia! que bonito cuadro! y el florero! , vengo del blog de Ana , y te descubro entre las nubes, con unas recetas y una pasion por la familia la cocina y las artes que me encanta.
Enhorabuena por tus regalos ! y esas rosquillas son muy entrañables.
Vendre a visitarte siempre que pueda.
Un saludo.
hola sonia:
estoy dando una vuelta por tu blog para ver todas las cosas ricas que tienes,como estas rosquillas que te han quedado genial.
un saludo
Regi,
Están muy buenas, pero sobre todo, para mí, son rosquillas que saben a recuerdos. Un abrazo.
Tartasacher,
Me alegra muchísimo verte por aquí. Desde luego que no tengo ningún inconveniente. Voy a hacer lo mismo con el tuyo, y ya te contaré cómo me salen los bombones de hierbabuena que me han dejado asombradita perdida. Un abrazo
Olguis,
¡Qué alegría volverte a ver! Te había perdido la pista. Voy a verte a tu blog. Un beso.
Shitaki,
También un alegrón verte por aquí. Ayer estuve en tu blog, pero no pude dejarte comentario porque no sé qué le pasaba a blogger. Voy a visitarte hoy a ver si va mejor. Un abrazo.
Belén,
Encantada de tenerte por aquí. ¡Hasta muy pronto!
Ana me encantan las recetas de familia, esas rosquillas huelen a mucho cariño y seguramente sabrán sabrosas como todo lo que has contado con tanto amor. Me emocionó leer el recuerdo para tu madre y me transportó a mis más entrañables momentos junto a la mía.
No conocia tu blog es muy interesante y muy original.Me encantan las rosquillas..y esta se ven divinas..tomo nota un saludo te invito a q conozcas mi blog.
Unmmm que pinta. ¿Que tipo de harina usas?. Gracias